
Según BLUE SHIELD (la “cruz roja para la cultura”), destruir el patrimonio cultural de un país es la forma más rápida de borrar su identidad nacional. Y no importa en cuántos sacos de arena y cubiertas protectoras los envolvamos, el patrimonio cultural de Ucrania corre un alto riesgo de destrucción.
Para combatirlo se hizo una copia de seguridad digital en la nube, donde no puedan llegar las bombas. La UNESCO dio a todos los ciudadanos el poder de crear modelos 3D de alta definición, y todo lo que necesitaban eran sus teléfonos. Se guardaron datos como planos en un archivo 3D basado en la nube para conservarlos para siempre. Entonces, si alguna vez son destruidos, los tesoros culturales de Ucrania podrán reconstruirse hasta el último detalle.
La startup 3D POLYCAM personalizó su tecnología de fotogrametría para Backup Ukraine.Utiliza el aprendizaje automático para convertir la cámara integrada de los teléfonos, el LiDAR y los datos de ubicación en planos digitales 3D de alta definición en un archivo seguro basado en la nube. Se lanzó una aplicación gratuita (iOS/Android) para todos los ucranianos, que permite a personas comunes y corrientes con poca formación capturar modelos 3D de una calidad que solía estar reservada a los estudios cinematográficos y que proporcionaba a los profesionales del desarrollo equipos costosos. Con más de 150 artículos, más de 1000 acciones y 135 000 visitas, hacemos correr la voz a todos los ciudadanos de Ucrania, convirtiendo a todos en guardianes de su patrimonio nacional.
Se trabajó estrecha colaboración con expertos en archiveros para garantizar que los datos se guardaran según los estándares de los museos y se permitió que socios confiables exportaran a más de 10 formatos 3D. Incluso se crearon nuevas medidas de privacidad para ayudar a los museos a ocultar la ubicación precisa de sus colecciones, protegiéndolas de saqueos invasores y ataques aéreos dirigidos. Se consiguieron +50.000 descargas y +35.000 capturas en Ucrania, Los ciudadanos ucranianos han respaldado muchas más esculturas que incluso los museos y colecciones de arte más grandes del mundo. Seis ONG prometieron su apoyo. Siete empresas internacionales donaron equipos, financiación y asistencia a los voluntarios en el terreno, incluso imprimiendo en 3D réplicas de estatuas amenazadas para prepararse para lo peor.
