La CNN hace un bonito despliegue de grafismo con un buen concepto, para combatir el mundo de las fake news.

Aunque vivimos en la era de la información, después de décadas de esfuerzos por parte de intereses políticos y empresariales para socavar las instituciones autorizadas, incluidas las elecciones, las agencias públicas, la ciencia, el periodismo independiente y los grupos de la sociedad civil, también estamos viviendo la era de la desinformación.

La difusión intencional de falsedades –y los consiguientes ataques a las minorías, la libertad de prensa y el Estado de derecho– desafían las normas y valores básicos de los que dependen la legitimidad institucional y la estabilidad política. Por eso, ver la verdad “real” detrás de cada afirmación nunca ha sido más importante.

Y CNN, al ser un canal de televisión multinacional basado en noticias, necesitaba decir eso: no importa lo que pase o lo que diga la gente, CNN siempre les informará. El verdadero. E, históricamente, al polígrafo se le ha denominado popularmente prueba de detector de mentiras. En resumen, el polígrafo registra una serie de respuestas corporales diferentes que luego pueden usarse para determinar si alguien está diciendo la verdad. Entonces tuvimos la idea de utilizar la estética del lenguaje del polígrafo para construir la identidad visual de nuestra campaña. Convertimos las líneas onduladas de las agujas en fotografías periodísticas poderosas que mostraban la verdad detrás de las narrativas deshonestas. En otras palabras: reinventamos un polígrafo para que pueda hacer lo que siempre ha hecho: no importa lo que diga la gente, te muestra la verdad. Justo como nosotros.